El hombre y la mujer son los únicos animales que saben reír. Por lo que diariamente nos reímos de algo que vemos, oímos o pensamos, da igual si son cosas reales o absurdas, lo que está claro es que unas lo hacen más que otras. Incluso algunas practican técnicas de risoterapia, para curar estados de ánimo y/o enfermedades, ya que está demostrado científicamente que la risa es positiva para toda persona.

Como es obvio, cuando una persona ríe o sonríe es porque se siente feliz y eso se contagia a todo el que le rodea, ya que es un relajante natural. Pero, ¿sabías que además de lo que podemos percibir visualmente, está generando sustancias beneficiosas para su organismo?

¿Qué pasa en el interior de una persona cuando ríe?

Mientras se ríe de verdad, el cerebro libera endorfinas y dopamina. Las primeras, tienen un efecto similar a la morfina y la segunda genera un estado de bienestar psicológico.

Junto con estas dos sustancias naturales generadas por el propio organismo, se produce una disminución de los valores de cortisol, la conocida “hormona del estrés”, por lo que todo contribuye a un bienestar generalizado que sin duda es muy notable en la salud de persona que ríe, ya que tiene efectos tales como:

• • Favorecer la cura de la depresión, el estrés y la angustia
  • Limpiar y ventilar los pulmones
  • Mejorar la oxigenación del cuerpo
  • Regular el pulso cardíaco
  • Disminuir la presión arterial de la sangra
  • Ayudar a trabajar el aparato digestivo y regula el intestino
  • Relajar los músculos tensos
  • Ayudar a quemar calorías
  • Mejorar la respuesta del sistema inmunológico ante enfermedades
  • Disminuir la producción de hormonas que causan estrés y malestar
  • Descargar tensiones
  • Potenciar la creatividad y la imaginación
  • Fortalecer los lazos afectivos de la persona con quién le rodea
  • Incrementar la autoestima y la confianza en uno mismo
  • Eliminar pensamientos y emociones negativos.
  • Aliviar el insomnio

En definitiva, reír nos ayuda a sentirnos mejor así como a mantener un buen funcionamiento de nuestra mente, y favorecer nuestras relaciones sociales. Así como a afrontar situaciones difíciles, pérdidas o decepciones.

Cuando reímos, estamos permitiendo a nuestro cuerpo olvidarse del dolor y comenzamos a pensar en perspectiva. Recuerda que es imposible reírse y estar triste al mismo tiempo. ¿Sonreímos? 🙂

Bienestarlife

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